Un experto en ARNm reconocido internacionalmente ha aportado pruebas durante su testimonio ante el Congreso, revelando que el gigante farmacéutico Moderna es consciente de que sus inyecciones de ARNm de Covid están provocando un “turbocáncer”.
El Dr. Robert Malone, inventor de la tecnología de la vacuna de ARNm, prestó testimonio en una audiencia en el Capitolio presidida por la representante republicana Marjorie Taylor Greene. En su presentación, el Dr. Malone mostró la patente de la vacuna Covid de Moderna.
La patente de Moderna revela que los viales de su vacuna COVID-19 contienen miles de millones de fragmentos de ADN. Estos fragmentos, junto con otras impurezas, se han asociado con el riesgo de defectos de nacimiento y cáncer.
En la patente, Moderna reconoce que los contaminantes de las inyecciones pueden provocar cáncer. A pesar de esta admisión, como enfatizó Malone en su testimonio, la Administración de Medicamentos y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) aparentemente pasó por alto esta información al otorgar la aprobación para el uso público de las inyecciones.
Se prefiere el ARN debido a los riesgos que implica, explicó Malone.
El Dr. Malone subrayó durante la audiencia que Moderna, en su patente, reconoce que el ARN es un componente preferido sobre el ADN en las vacunas.
Sin embargo, a pesar de los riesgos, la inyección de ARNm de Moderna está contaminada con miles de millones de fragmentos de ADN.
“Moderna tiene una patente sobre el uso de ARN para vacunas”, dijo Malone en la audiencia. “Y en eso, Moderna reconoce explícitamente que el ARN es superior al ADN para fines de vacunas debido a problemas, incluida la posibilidad de mutagénesis por inserción que podría conducir a la activación de oncogenes o la inactivación de genes supresores de tumores.
“La FDA dice que no tiene conocimiento de ninguna preocupación, pero Moderna en su propia patente establece exactamente las mismas preocupaciones que existen sobre el ADN en la mutagénesis por inserción y la genotoxicidad.
“Moderna lo sabe: el ADN es un contaminante.
“Se deja ahí por la forma en que lo producen… usan ADN para producir ARN, y luego degradan el ADN, y luego tienen que purificar el ADN degradado para separarlo del ARN. Y el proceso que están utilizando aparentemente no es tan bueno”.
El Dr. Malone advirtió que quienes recibieron las inyecciones de ARNm probablemente correrían el riesgo de sufrir “cualquier cosa asociada con daños en el ADN”.
En términos de daño al ADN, Malone explica que “los defectos de nacimiento y el cáncer son los más notables”.
