En Argentina, una joven de 32 años murió de covid-19 poco después de denunciar que el personal médico nunca le brindó la atención que requería. Su caso genera conmoción y pone en evidencia la crítica situación que atraviesa el país sureño por la pandemia de coronavirus.
Solo algunos días antes de su deceso, Noelia Mercado, que estudiaba Enfermería y era madre de un niño de 11 años, había denunciado que no recibía los cuidados necesarios en el Hospital San Antonio de Padua. “Acá me dejaron morir como un perro, sola”, publicó en su cuenta del Facebook el 2 de junio. “Estoy saturando 83 y el médico que vino hace una hora y se fue, no vuelve. Pedía muerte digna al menos”.
“Ella me decía por WhatsApp ‘por favor avisa que me vengan a canalizar, estoy con fiebre, con 39 grados’, se llevó el termómetro como estudiante de enfermería que era, también el saturómetro y la medicación y me escribía ‘estoy saturando mal, sí o sí voy a tener que tomar la medicación hasta que vengan”, dijo Teresa Gutiérrez, madre de Noelia, en conversación con el medio local TN.
Noelia dio positivo a una prueba covid el 25 de mayo y fue internada el 31. Perdió la vida solo algunos días después, el 5 de junio.
“Ella ya no podía hablar, llamaba a los enfermeros y nadie la escuchaba, pasaba hora y media o dos horas y no llegaban a atenderla, pedía chata, pedía agua, que la ayudaran porque se estaba muriendo y ya no saturaba, ya no tenía más oxígeno”, declaró Teresa, quien denunció el hecho públicamente.
Cuando la paciente era incapaz de comunicarse, “recurría a golpear las cosas para que un enfermero fuera por el ruido y le alcanzaran un vaso de agua”.
“A través de una videollamada pude ver cómo ella tenía la boca toda lastimada de la deshidratación que el Covid hace que tenga y en toda la madrugada mientras nos fuimos escribiendo, cuando le consulté si le habían dado agua me dijo que se la dieron recién a las 3 de la mañana, o sea, tres horas después de que empezó a pedirla”, agregó.
Valeria Alaniz, vicedirectora del hospital donde Noelia pasó sus últimas horas, dijo en conversación con La Voz del Interior que la joven siempre “recibió toda la atención” por parte del personal médico.
“El lunes 31 de mayo se le hizo una nueva valoración y se decidió internarla. Comenzó a empeorar como nos sucede en muchos de los pacientes, por más que tengan oxigenoterapia. El 2 a la madrugada tuvo una demanda mayor de oxígeno, se intentó terapia de alto flujo. Luego fue derivada a terapia para una asistencia respiratoria. El sábado 5 falleció. Siempre recibió toda la atención por parte de enfermería, médicos y kinesiología”, declaró.
Los restos de Noelia fueron sepultados y su familia no descarta una denuncia judicial contra el nosocomio. “Hacemos lo que podemos. Noelia dejó a un niñito de 10 años, a un papá destruido, a una familia destruida”, expresó su madre.
FUENTE: MAG EL COMERCIO