Asimismo, indicaron que cientos de casas han quedado destruidas en la provincia de Paktika, una localidad cercana al epicentro del sismo que cuenta con poco desarrollo en infraestructura.
En la madrugada del miércoles 22 de junio, un sismo de 5.9 grados de magnitud sacudió al sureste de Afganistán, territorio cercano a la frontera entre este país y Pakistán. De acuerdo a lo que reportó el Servicio Geológico de los Estados Unidos, el epicentro del movimiento telúrico se ubicó en la provincia de Paktika, a 44 kilómetros de la ciudad de Khost.
Según las primeras estimaciones brindadas por las autoridades locales, el saldo de víctimas sería de al menos 250 muertos y más de 150 heridos.
No obstante, con el transcurrir de las horas, el número de afectados se ha elevado de forma considerable y, por el momento, portavoces del Gobierno señalan que la cifra de fallecidos supera los 1.000, a los que se sumarían un aproximado de 1.500 personas heridas. En este contexto, hay expectativa de que la situación pueda continuar variando.