Esto ya no puede considerarse un reportaje, documentación, ni siquiera activismo político, es directamente apología al terrorismo y a la delincuencia.
El Salvador cumplió el pasado 4 de diciembre 500 días sin homicidios, desde que Nayib Bukele asumió el poder. Este hecho sin precedentes en la región es la razón por la que hoy el mandatario cuenta con más de 90 % de aprobación en el país. Para contextualizar un poco, en todo el gobierno del socialista Sánchez Ceren, no hubo un solo día sin homicidios; las razones para festejar son demasiadas, pero así no lo piensan ciertas organizaciones de «derechos humanos».
Tan solo 24 horas después de anunciarse la meta de 500 días sin homicidios, la ONG, Amnistía Internacional publicó un «informe» que rápidamente comenzó a ser desplegado por el Mainstream Media occidental, en el que intentan equiparar el terrorismo de las pandillas, con los operativos de seguridad ejecutados por el gobierno salvadoreño.
La agencia española EFE, financiada por el gobierno socialista de Sánchez, escribió un artículo en base al reportaje de AI, que rápidamente ha sido republicado en distintos medios de masiva difusión como Infobae, en el que se puede leer:
«Amnistía Internacional (AI) advirtió este martes que la «violencia» ejercida por el Estado salvadoreño, en el marco de un régimen de excepción vigente desde marzo de 2022 y de una «alarmante regresión» en la protección de los derechos humanos, «reemplaza gradualmente» a la ejercida por las pandillas en las comunidades empobrecidas».
AI presentó en San Salvador un informe en el que se señala al Gobierno de Nayib Bukele, ahora candidato a la reelección inmediata, de restringir y vulnerar «los derechos fundamentales, incluyendo el derecho a la vida y la prohibición de la tortura».
«Lo que estamos presenciando en El Salvador es una repetición trágica de la historia, donde la violencia del Estado está reemplazando gradualmente la violencia de las pandillas, dejando a las mismas comunidades vulnerables atrapadas en un ciclo interminable de abusos y desesperanza», afirmó la directora para las Américas de AI, Ana Piquer, en un comunicado».
Para brindar más contexto: Los cuatro gobiernos que precedieron a la administración de Bukele (Flores, Saca, Funes y Sanchez Cerén) solo pudieron mantener el país sin homicidios durante un total de dos días en un lapso de 20 años.
El primer caso ocurrió durante la presidencia de Antonio Saca del centroderechista ARENA en 2005, cuando el volcán Ilamatepec en Santa Ana hizo erupción y coincidió con una alerta roja por la tormenta Adrian. Esto llevó a que la población permaneciera resguardada en sus hogares.
El segundo episodio se registró en septiembre de 2012 bajo la presidencia del socialista Mauricio Funes. En esta ocasión, el gobierno del FMLN, en su primer mandato, acordó una tregua con las pandillas, y Funes se encontraba programado para pronunciar un discurso ante la ONU.
Cabe recalcar que durante ese período, las pandillas fueron responsables del asesinato de más de 120 mil personas y forzaron a alrededor de 1.5 millones de salvadoreños a abandonar sus hogares. Ahora, según la ONG de «derechos humanos», el terrorismo pandillero es equiparable a los operativos de seguridad del Estado que han limpiado las calles salvadoreñas de la delincuencia.
En el 2015 la tasa de homicidios por 100.000 habitantes en El Salvador gracias a la violencia de las pandillas era de 106 por cada 100 mil habitantes, hoy esa cifra se sitúa en 2.2; mucho más bajo que incluso Estados Unidos y otros países desarrollados. Esto ya no puede considerarse un reportaje, documentación, ni siquiera activismo político, es directamente apología al terrorismo y a la delincuencia. Odian la civilización, quieren caos, quieren a las pandillas en el poder, quieren destrozar cada país donde reine la paz y la tranquilidad.