El primer ministro, Mario Draghi, se muestra favorable a imponer la vacuna y anuncia que se comenzará a inocular la tercera dosis a la población más frágil
Fuente: El País
Italia afronta estos días un conflicto político y social a cuenta del certificado de vacunación obligatorio. Los movimientos antivacunas, secundados por algunos sectores de partidos de la ultraderecha, han promovido movilizaciones violentas contra el salvoconducto necesario ya también para el transporte público, los restaurantes y, próximamente, también para ir a trabajar. El primer ministro, Mario Draghi, ha salido al paso este jueves en una rueda de prensa y ha cargado contra estos grupos. Además, ha asegurado que Italia estudiará obligar a su población a vacunarse cuando la situación lo permita, un paso que hasta la fecha no ha dado ninguna de las grandes democracias occidentales.
La idea original del certificado verde —así se llama el pasaporte de vacunación— era justamente evitar imponer la obligación de vacunarse a toda la población. Se pretendía limitar tanto la vida pública que los ciudadanos elegirían por fuerza la vía de la inmunización. Se evitaba así también problemas de naturaleza jurídica y enfrentamientos sociales. Sin embargo, el debate político suscitado ha hecho pensar al Ejecutivo que quizá convenga actuar de forma más directa y exigir la vacunación a todo el mundo. Draghi, preguntado por ello y por la llegada de la tercera dosis en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, ha dicho: “Respondo con un sí a las dos preguntas”. Fuentes de Palacio Chigi matizan a este periódico que dependerá de la evolución del criterio de la Agencia Europea de Medicamentos y de cómo prospere la campaña de vacunación. En caso de introducir la obligatoriedad, señalan, se suprimiría el actual certificado verde.
La tercera dosis, ha explicado Draghi, también comenzará en breve a inocularse a la población. Algo que ha confirmado el ministro de Sanidad, Roberto Speranza. “Hay ahora mismo un debate que llevará a la aprobación de la inoculación de la tercera dosis. Yo creo que será a finales de este mes, se empezará con las personas que tienen una respuesta inmunitaria más frágil”, ha señalado Speranza.
El primer ministro añadió que el horizonte para llegar al 80% de vacunados también se ha fijado en septiembre. “La campaña de vacunación continúa y a finales de este mes tendremos un 80% de la población (mayor de 12 años) vacunada. Hoy ya hemos llegado al 70%. Estoy seguro de que llegaremos a ese objetivo para finales de mes. Esto es un alivio para la recuperación económica y para que los alumnos vuelvan a las aulas”, ha asegurado Draghi. El primer ministro destacó que poner fin a la educación a distancia con una vuelta segura a las aulas es una prioridad para el Gobierno y ha celebrado que “el 91,5% de los profesores han recibido al menos una dosis de vacunas”.
El primer ministro, además, ha insistido en que la población debe vacunarse “porque es un acto de protección individual y de solidaridad con los demás”, y ha mostrado su apoyo a los periodistas, médicos y políticos agredidos en los últimos días por parte de colectivos que rechazan las vacunas. “Quiero expresar mi total solidaridad con los que han sido agredidos por parte de los contrarios a las vacunas, una violencia particularmente odiosa y cobarde cuando se ejerce contra quienes informan y quienes están en primera línea para combatir la pandemia”. El pasado miércoles, primer día en que entró en vigor la norma que obliga a exhibir el certificado verde para usar el transporte público entre regiones, algunos miembros de estos colectivos intentaron bloquear sin ningún éxito las entradas a las estaciones ferroviarias.
Las discrepancias por el certificado verde también llegaron al seno del Gobierno de coalición esta semana. La Liga, el partido que lidera Matteo Salvini, comenzó a sembrar dudas sobre su legitimidad y con la posibilidad de retirarle el apoyo. Draghi, sin embargo, cree que el Ejecutivo sigue unido. “No veo el final del Gobierno. Todavía veo una coalición. Hay opciones políticas, culturales, personales y profesionales diferentes en esta mayoría. El grueso de sus miembros siguen de acuerdo. No veo ningún desastre en el horizonte”, ha concluido.