Los datos publicados el martes reportaron más de 43,000 infecciones reportadas entre los residentes del condado de Los Ángeles de 16 años o más. De ellos, 10,895 -o el 25.3%- ocurrieron en personas completamente vacunadas; 1,431 -3.3%-, en parcialmente vacunados; y 30,801 -71.4%-, en no inmunizados.
Cerca del 25% de las infecciones por SARS-CoV-2 entre los residentes del condado de Los Ángeles ocurrieron en residentes completamente vacunados entre mayo y el 25 de julio, un periodo que incluye el impacto de la altamente transmisible variante Delta.
Los datos, publicados en el informe semanal sobre muertes y enfermedades de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), mostraron un aumento de estas infecciones entre las personas completamente vacunadas.
Los CDC se basan en datos de cohortes, como el estudio del condado de Los Ángeles, para determinar si los estadounidenses necesitan una tercera dosis de vacunas contra el COVID-19 para aumentar la protección. La semana pasada, científicos del gobierno establecieron una estrategia para las dosis de refuerzo a partir del 20 de setiembre, en espera de revisiones de la Administración de Drogas y Alimentos y los CDC.
Los datos publicados el martes reportaron más de 43,000 infecciones reportadas entre los residentes del condado de Los Ángeles de 16 años o más. De ellos, 10,895 -o el 25.3%- ocurrieron en personas completamente vacunadas; 1,431 -3.3%-, en parcialmente vacunados; y 30,801 -71.4%-, en no inmunizados.
Sin embargo, las vacunas protegieron a las personas de casos más graves. Según el estudio, el 3.2% de los totalmente vacunados infectados con el virus fueron hospitalizados, solo el 0.05% ingresaron en una unidad de cuidados intensivos y el 0.25% tuvieron que ser conectados a un ventilador.
Entre los no vacunados que enfermaron, el 7.5% fue hospitalizado, el 1.5% ingresó en una UCI y el 0.5% requirió soporte respiratorio con un ventilador mecánico.
Además de los datos del condado de Los Ángeles, los CDC publicaron una actualización del estudio de cohorte HÉROES entre trabajadores de la salud que mostró una caída significativa en la efectividad de la vacuna en ocho estados entre trabajadores de primera línea inoculados que se infectaron con el virus.
La eficacia de la vacuna durante el periodo del estudio, cuando Delta era predominante, cayó al 66% desde el 91% anterior a la llegada de la variante, según el informe.